#084 - Las voces católicas serán "fuertes y organizadas" en la conferencia del clima de la ONU

Un niño aparece en una foto de archivo frente a las turbinas eólicas del parque eólico de Ashegoda, cerca de Mekele, en la región etíope de Tigray. El cardenal congoleño Fridolin Ambongo Besungu dijo que la crisis climática está frenando el desarrollo africano. (Crédito: Kumerra Gemechu/Reuters vía CNS.)

YAOUNDÈ, Camerún - A pocas semanas de la conferencia de la ONU sobre el cambio climático COP27 que tendrá lugar en Sharm el-Sheikh, Egipto, Catholic Relief Services (CRS) ha hecho un llamamiento para que se tomen medidas audaces en el esfuerzo global por mantener las temperaturas globales en niveles manejables.

CRS es el brazo de desarrollo internacional de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos.

Bill O'Keefe, vicepresidente ejecutivo de Misión, Movilización e Influencia de CRS, y Yohannes Subagadis, coordinador de medios de vida y paisajes de CRS África, hablaron con Crux sobre el impacto del cambio climático, especialmente en África.

Crux: El mundo estará pendiente de la conferencia de la ONU sobre el cambio climático COP 27 que se celebrará en Egipto. ¿Qué cree que debería abordar la conferencia que otras reuniones de la COP no han conseguido?

O'Keefe: En la COP26, los países no alcanzaron el objetivo de 100.000 millones de dólares que prometieron inicialmente para 2020. En esta COP, los países asistentes deben presentar un objetivo de financiación claro y un plan. La financiación, especialmente la de las personas que viven en países con infraestructuras deficientes, debe llegar en forma de subvenciones, no de préstamos. Deberían destinarse muchos más fondos a la adaptación, especialmente a las comunidades locales y al sector agrícola.

Países como Estados Unidos deben liderar esta cuestión. La COP27 debe centrarse en el cumplimiento de las promesas y los compromisos adquiridos y en garantizar que los países que menos han contribuido a crear estos problemas reciban el apoyo y la financiación necesarios para asegurar que sus poblaciones puedan adaptarse a los impactos del cambio climático.

En la COP27, los países tendrán otra oportunidad de establecer un mecanismo para hacer frente a los impactos climáticos que se están produciendo ahora. Sin una financiación y una facilitación fiables y completas para ayudar a los países a hacer frente a las pérdidas y los daños inducidos por el clima, los países que luchan por los problemas de infraestructura se hundirán más en la deuda cada vez que se vean afectados por desastres climáticos que no han causado.

Crux: ¿Cuáles deberían ser los temas de conversación de África en la COP27, especialmente cuando el continente es el anfitrión este año?

Subagadis: África debería aprovechar esta oportunidad para reclamar una acción climática significativa que ayude a afrontar la crisis climática imperante en el continente. Deben pedir que todos los países rindan cuentas del Acuerdo Climático de París y cumplan sus promesas, en particular en lo que respecta a la ayuda financiera para que los países en desarrollo puedan hacer frente y adaptarse a los impactos del cambio climático.

La inseguridad alimentaria, el estrés hídrico, los conflictos, los desplazamientos y las migraciones se ven exacerbados por el cambio climático y aumentan día a día en el continente. Por lo tanto, ya es hora de pedir una acción global para redoblar las inversiones para mejorar la adaptación al clima, poniendo en marcha sistemas de alerta temprana, haciendo esfuerzos concertados hacia la gestión integrada de los recursos hídricos, así como un mayor apoyo a los sistemas de redes de seguridad social en África.

Crux: El Papa Francisco, a través de su encíclica Laudato Si', ha hecho del cuidado de la tierra una piedra angular de su papado. ¿Qué tan fuerte y fuerte debe ser la voz católica cuando la comunidad mundial se reúna en Egipto?

Bill O'Keefe: La voz católica en la COP27 será fuerte y organizada. Siguiendo el liderazgo del Santo Padre, CRS está trabajando con Caritas, el Movimiento Laudato Si', las universidades católicas y otros en este tema y tendremos una presencia en la conferencia.

Como comunidad religiosa que trabaja en más de 110 países, vemos las crisis como los ciclones a través de los ojos de las personas directamente afectadas. Nos inspiramos en nuestra fe, que antepone la dignidad humana a cualquier otra cosa. El Papa Francisco ha sido una voz moral fuerte en la cuestión del cambio climático, y continuamos siguiendo su ejemplo.

El hecho de que las negociaciones de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático no hayan abordado aún las pérdidas y los daños refleja la falta de atención a la experiencia vivida por las personas que sufren los impactos del cambio climático. El Acuerdo Climático de París está contribuyendo a impulsar el desarrollo de nueva energía solar, la readaptación de las viviendas, la financiación de diques y los sistemas de alerta temprana para los desastres naturales, pero no hay nada para los que se encuentran sin vivienda debido a una inundación o se quedan sin nada a causa de un ciclón. La voz católica sonará fuerte y clara para esas personas que se encuentran en situaciones críticas que amenazan su vida.

Fuentes:

https://cruxnow.com/church-in-africa/2022/10/catholic-voices-to-be-strong-and-organized-at-un-climate-conference

Traducido por el equipo de www.eventosfinales.net

¿Qué dice el Espíritu de Profecía?

Satanás obra asimismo por medio de los elementos para cosechar muchedumbres de almas aún no preparadas. Tiene estudiados los secretos de los laboratorios de la naturaleza y emplea todo su poder para dirigir los elementos en cuanto Dios se lo permita. Cuando se le dejó que afligiera a Job, ¡cuán prestamente fueron destruidos rebaños, ganado, sirvientes, casas e hijos, en una serie de desgracias, obra de un momento! Es Dios quien protege a sus criaturas y las guarda del poder del destructor. Pero el mundo cristiano ha manifestado su menosprecio de la ley de Jehová, y el Señor hará exactamente lo que declaró que haría: alejará sus bendiciones de la tierra y retirará su cuidado protector de sobre los que se rebelan contra su ley y que enseñan y obligan a los demás a hacer lo mismo. Satanás ejerce dominio sobre todos aquellos a quienes Dios no guarda en forma especial. Favorecerá y hará prosperar a algunos para obtener sus fines, y atraerá desgracias sobre otros, al mismo tiempo que hará creer a los hombres que es Dios quien los aflige. (Conflicto de los Siglos pág. 575.4)

Satanás está obrando en la atmósfera; la está envenenando, y nosotros dependemos de Dios para la protección de nuestras vidas: de nuestra vida actual y eterna. Y por encontrarnos en la posición en que estamos, necesitamos estar bien despiertos, plenamente consagrados, completamente convertidos y cabalmente dedicados a Dios. Pero al parecer permanecemos inactivos como si estuviésemos paralizados. ¡Dios del cielo, despiértanos! (Manuscrito 1, 1890). - Mensajes Selectos 2 pág. 59.3

Dios no ha impedido que los poderes de las tinieblas hagan su obra mortífera de viciar el aire, una de las fuentes de vida y alimento, con elementos mortíferos. No solo ha sido afectada la vida vegetal, sino que el hombre mismo sufre de pestilencia [...]. Estas cosas son el resultado de gotas de las copas de la ira de Dios que caen sobre la tierra, y son pálidas representaciones de lo que acontecerá en el futuro cercano.—Mensajes Selectos 3:446-447 (1891). EUD 26.2

Aumentarán las hambrunas. Las pestilencias barrerán a miles. A nuestro alrededor hay peligros procedentes de las potencias externas y de las operaciones satánicas de adentro, pero ahora se está ejerciendo el poder restrictivo de Dios.—Manuscript Release 19:382 (1897) - Eventos de los últimos días (1992) pág. 27.3

¡Con cuánta frecuencia oímos hablar de terremotos y ciclones, así como de la destrucción producida por incendios e inundaciones, con gran pérdida de vidas y propiedades! Aparentemente estas calamidades son estallidos caprichosos de las fuerzas desorganizadas y desordenadas de la naturaleza, completamente fuera del dorninio humano; pero en todas ellas puede leerse el propósito de Dios. Se cuentan entre los instrumentos por medio de los cuales él procura despertar en hombres y mujeres un sentido del peligro que corren. (Profetas y Reyes pág. 207.1)